LOS PARTIDOS DE IZQUIERDA ANTE LAS PRÓXIMAS ELECCIONES PARLAMENTARIAS EN LA
ARGENTINA
Por Sergio Daniel Aronas – 30 de julio de 2017
Las fuerzas de izquierda en las elecciones primarias que se realizarán en
agosto próximo marchan como ha sido casi siempre en forma dividida, separadas
una de otras y en muchos casos peleados en términos de disputas históricas
irreconciliables, imposibles de saldar y poder dar paso a la conformación de
una unidad programática global y revolucionaria.
Los partidos políticos de izquierda que vamos a analizar son:
1) El Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT)
2) El Partido Comunista Argentino (PCA)
3) Izquierda al Frente por el Socialismo (IFS)
4) Autodeterminación y Libertad (AyL)
1) Hoy la principal fuerza de izquierda es la representada por el Frente de
Izquierda y los Trabajadores (FIT) que en las últimas elecciones alcanzó el
millón de votos en todo el país logrando acceder a cuatro diputados nacionales
y tiene representantes en las legislaturas de Provincia de Buenos Aires, Ciudad
Autónoma de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Neuquén, Salta y Santiago del
Estero y en decenas de concejos deliberantes. Está formado por el Partido
Obrero, el Partido de los Trabajadores por el Socialismo (PTS) y la Izquierda
Socialista. Son básicamente de orientación trotskysta con la particularidad de
que han formado su propio bloque de diputados por primera vez en la historia
argentina. Cuenta con el apoyo de otras agrupaciones menores, en cuanto a su
número de militantes y grado de inserción en el movimiento de masas tales como: el PSTU, Convergencia de
Izquierda, MIR, MP La Dignidad , Opción Socialista, POR-Masas, Movimiento 20 de
Diciembre, Pueblo en Marcha, CC-POR, Comunismo Revolucionario, Causa Obrera y
FUT.
En el ballotage de noviembre de 2015 llamaron a votar en blanco con el
argumento de que tanto Mauricio Macri como Daniel Scioli son la misma política
de la burguesía patronal capitalista y por ese motivo, no tenía nada que ver
con la postura del Frente. Esta posición desató fuertes polémicas con otras
fuerzas de izquierda que llamaban a votar a Scioli para impedir la victoria de
la derecha de Macri. La diferencia de votos favorable a Macri no se vio
influenciado por el voto en blanco que apenas rebasó los 306 mil votos, lo cual
quiere decir, que sólo el 38% de quienes votaron al FIT lo hicieron en blanco
en el ballotage que sobre el total fue el 1,1%. De modo que lo que definió el
voto triunfante a Macri fue la cantidad de personas que no votaron (más de 7
millones de electores).
La periodista Ángela Suárez del
periódico “Diario de Izquierda” nos habla sobre el origen de este Frente: “Surgió para enfrentar el intento
anti-democrático del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner de dejar fuera
a los partidos que no superen el 1.5% de la votación. Mediante primarias
obligatorias (PASO) buscó limitar el desarrollo de la izquierda clasista, sin
embargo, ese mismo año el FIT debutó obteniendo 550.000 votos en las elecciones
presidenciales y cerca de 600.000 votos en las parlamentarias. El 2013 logró
duplicar su elección previa con 1.260.000 votos a nivel nacional, logrando
ingresar tres diputados nacionales al parlamento y decenas de legisladores
provinciales y concejales en numerosos municipios. En junio de 2015, Nicolás
Del Caño, diputado nacional del PTS y candidato a Presidente por el FIT,
alcanzó el 17% en capital de Mendoza en las elecciones a gobernador, mostrando
una nueva alternativa emergente de los trabajadores y la juventud.” (http://www.laizquierdadiario.com/Que-es-el-Frente-de-Izquierda-y-de-los-Trabajadores-FIT)
Es probable que realicen una muy
buena elección y de ser así debe ser tomado como una plataforma para lanzar una
verdadera unión de fuerzas de izquierda tengan el origen, historia y papel que
tuvieron y que tienen en las luchas del pueblo argentino. Es preciso saber, es
preciso darse cuenta que solo por el camino de la unidad los partidos de
izquierda llegaron al poder y si recorremos la trayectoria histórica de América
Latina evidencia la certeza de este concepto de unidad. El problema es que este
Frente se comporta como fuerza electoralista y no como fuerza revolucionaria
porque si le importara la revolución como ellos dicen afirmar, tendrían que
dejar su sectarismo y buscar formas, maneras, métodos, de converger con otras
agrupaciones similares en ideología y programa.
2) El Partido Comunista de la
Argentina es hoy el más antiguo del país puesto que el año próximo cumplirá
cien años de vida militante. Como lo viene realizando desde 2007 volverá a
integrar el Frente de Unidad Ciudadana que tiene como estrella estelar y principal
referente a la Sra. Cristina Fernández de Kirchner, ex presidenta de la Nación
entre 2007 y 2015. Es una táctica habitual del Partido Comunista apoyar listas
de candidatos del peronismo ya que en septiembre de 1973 apoyó la fórmula
Perón-Perón y luego de la dictadura en las elecciones de octubre de 1983 llamó
a votar por la fórmula presidencial del Justicialismo que tenía como candidatos
a Ítalo Luder y Deolindo Felipe Bittel y para senadores un par de candaditos
horriblemente espantosos como Carlos Ruckauf (el que años más tarde como
gobernador proponía “meter bala” a los delincuentes) y el sindicalista
telefónico Juna José Taccone. En las filas partidarias hubo mucho debate y fuerte
oposición a esta decisión que el Partido la pensó en función de las masas
obreras peronistas y no en los candidatos que eran horrorosos. Y en muchos
barrios de la Capital Federal donde la mayoría de los militantes eran de capas
medias no acataron la orden. Yo mismo que en aquel momento era Secretario
Político de la Juventud Comunista de La Paternal les dije que votaran a quien
mejor le gustara. El partido presentó candidatos a diputados, concejales y para
consejeros vecinales. Mi voto presidencial fue al Partido Intransigente (Oscar
Alende con Lisandro Viales) y los candidatos comunistas.
Ahora vuelve a apoyar y ser parte
de Unidad Ciudadana a nivel nacional y de Unidad Porteña en la ciudad de Buenos
Aires. En ambas instancias no hay candidatos del partido comunista. El motivo
para apoyar esa alianza no tiene que ver con lo ideológico y lo programático
sino más bien con cuestiones legales y jurídicas que de no ir pueden perder su
personería como partido nacional ya si va solo y no logra ese 1,5% de los votos
queda afuera del actual sistema político de la Argentina.
3) La Izquierda al Frente por el
Socialismo es un caso increíble de fuerza política por los vaivenes que
tuvieron en los últimos diez años. Muy ingeniosos con el nombre no han sido
porque es casi un calco del FIT con la diferencia de “socialismo” por
trabajadores. Está conformado por el Movimiento de Trabajadores por el
Socialismo (MST) y el Nuevo Movimiento al Socialismo (NMAS)
En el sitio web del Nuevo Masa
afirman que: “El nombre del nuevo frente
de izquierda constituido a nivel nacional sintetiza la idea de que la izquierda
argentina debe unirse y pasar al frente en el impulso de la pelea contra el
ajuste de Macri y las corporaciones, así como proponer una alternativa política
distinta, socialista, frente a todas las variantes del sistema.” Puro
voluntarismo porque esta agrupación no solo no impulsó ninguna clase de unidad
sino que deshizo las que participo. Además al MST le queda su pésima actitud
frente a la rebelión del campo saliendo a apoyar a los ruralistas y esgrimiendo
como argumento de su posición la de “diferenciar los distintos sectores del
campo”. Lo que verdaderamente hicieron fue quedar pegados a la Sociedad Rural
Argentina (SRA), cuya consecuencia fueron las burlas y el repudio generalizado
pues como es posible un partido de izquierda esté al lado de los grandes
terratenientes. Un error garrafal del que jamás se podrán recuperar.
4) Autodeterminación y Libertad
es el partido fundado por el ex diputado trotskysta de América y el abogado
Luis Zamara que tuvo un destacadísima actuación como legislador nacional en sus
dos años de mandato bajo Izquierda Unida. El Dr. Zamora, un gran luchador por
los derechos humanos, entre cuyas causas que defendió fue el caso del secuestro
y desaparición de la sueca Dagmar Hagelin, llegó al Congreso como candidato por
el Movimiento al Socialismo (MAS) dentro de Izquierda Unida por la provincia de
Buenos Aires.
En esta nueva elección se
presenta solo con sus propios candidatos sin haber podido alcanzar acuerdos con
el FIT para formar una alianza más
amplia.
Conclusiones
Estos son los principales
partidos de la izquierda marxista de la Argentina que, como pueden observar,
van todos separados, desunidos y lo más grave que están peleados en un nivel
irreconciliable, lo que hace aun más difícil las perspectivas de la izquierda
para ganas espacios políticos y poder
Se mueven con aspiraciones
electoralistas ya que ninguno plantea seriamente una plataforma revolucionaria
en el sentido de lucha por la abolición, supresión y liquidación del
capitalismo como sistema en la Argentina,
Nadie plantea en la izquierda la
lucha por el socialismo y esto es un problema ideológico uy grave que lleva a
debates muy profundos porque la izquierda no está para administración la crisis
del capitalismo; la izquierda no está para luchar contra el neoliberalismo como
dicen muchas agrupaciones; la izquierda está para luchar por el poder y estas cuestiones
no solo no figuran en las plataformas partidarias sino ni siquiera se las lanza
al debate.
Hay una pérdida de identidad
ideológica, una inercia en el pensamiento teórico y una situación donde no se
estudia ni se analizan las experiencias unitarias de otros países de América
Latina.
No se ve un compromiso
revolucionario de dejar los personalismos y luchar por un programa de
transformaciones que necesita la Argentina porque aun resulta que hay sectores que
creen que el capitalismo puede ser humano o civilizado y que con unas cuantas
reformas está todo hecho. El debate sobre la propiedad sobre los medios e
instrumentos de producción no existe como así tampoco el enfoque sobre las vías
de la revolución porque parece ser que hablar en estos tiempos del capitalismo
imperialista sobre la revolución no conviene ni está de moda o porque
piantavotos o la gente le huye porque implicaría entrar en un esquema de
confrontación directa, es decir, en la violencia política. En este sentido no
se detienen a analizar la violencia diaria que el capital ejerce sobre el
pueblo todos los días con despidos, represión, cierre de empresas, reducción de
salarios, aumento de la pobreza, la delincuencia, la inseguridad y otras lacras
capitalismo como las drogas, el juego, la prostitución, el narcotráfico, la
trata de personas.
Estos males del capitalismo han
sido liquidado en varios países que eligieron el socialismo como alternativa
real y válida para sus pueblos. Esa experiencia es la que debemos aprender;
aprender a realizar la unidad en pie de igualdad y en la diversidad; discutir
todo pero nunca romper la fuerza revolucionaria que es la garantía para el
pueblo empiece a vivir y salga de la prehistoria