ANTE LA MUERTE DE PATRICIO ECHEGARAY
Por Sergio Daniel Aronas – 9 de agosto de 2017
Este miércoles 9 de agosto falleció
el camarada Patricio Echegaray quien fue entre 1989 y 2016 Secretario General
del Comité Central del Partido Comunista de la Argentina y actualmente era su
Presidente (entre los partidos comunistas el cargo directivo principal es el de
Secretario General. El de presidente es más bien honorífico).
Su anterior cargo de
responsabilidad fue la de haber sido entre 1980 a 1989 Secretario General de la
Federación Juvenvil Comunista (FJC, la Fede).
Nació en la provincia de San Juan
en octubre de 1946 y por su militancia Patricio Echegaray fue varias veces encarcelado
siendo juzgado y condenado por las "leyes" anticomunistas de las
dictaduras que asolaron nuestro país, especialmente por la ley 15.701 de
represión al comunismo puesto en vigencia durante la dictadura militar del
Gral. Juan Carlos Onganía.
Fue maestro de profesión y
dirigente sindical en su actividad.
Tuve la oportunidad de conocerlo
y hablar con él cara a cara, mano a mano en tres ocasiones, la primera: en el
cierre de la IX Conferencia de la FJC en noviembre de 1981 en que fui como
invitado en calidad de secretario de prensa de la Fede del barrio de La
Paternal; la segunda, en un acto realizado en julio de 1984 en el que el
histórico fundador del Partido Rodolfo Ghioldi, el único argentino que habló
con Lenin, fue el orador principal y en ese aspecto Patricio Echegaray fue también
un brillante expositor del arte discursivo. Y la tercera vez fue en la
inauguración de la Ferifiesta de 1985.
En el archivo de mi biblioteca
guardo varios informes suyos. Para mí su mayor mérito fue recuperar para el
partido la figura de Ernesto Che Guevara cuando en junio de 1984 y en medio de
la gran huelga de los obreros de la Ford Motors, encabezó un gran acto en
Rosario en el cumpleaños del gran Comandante y revolucionario argentino-cubano.
Recuerdo el alto impacto que causó este evento porque las ideas y el
pensamiento del Che Guevara estaban totalmente prohibidas y nadie lo mencionaba
pese a que en todo los actos y reuniones de cantaba la hermosa canción de
Carlos Puebla “Hasta siempre”.
Mi impresión general es que su
paso por la dirección del partido provocó una serie de escisiones que
provocaron el surgimiento de dos nuevas formaciones comunistas y a consecuencia
de lo cual, hoy el panorama comunista en la Argentina consiste en la presencia
de tener cuatro partidos comunistas. Por orden de aparición, tenemos primero al
Partido Comunista fundado el 6 de enero de 1918 y que el año próximo cumplirá
100 años de vida. El segundo nace de la gran división de 1968 cuando a raíz de
la caída en combate del Che en Bolivia, la revolución cultural china, el Mayo
francés, surge una profunda división que da origen al Partido Comunista
Revolucionario, de orientación maoísta, luego devenido en Partido del Trabajo y
del Pueblo (PTP). Ya bajo la conducción de Patricio Echegaray se produce la
tercera división al fundarse el Partido Comunista Congreso Extraordinario,
formado por cuadros desplazados del Comité Central tras el XVI Congreso de
1986. El cuarto Partido es el partido Comunista de los Trabajadores (PCT) que
nace en noviembre de 2005 y s funda oficialmente el 8 de enero de 2006 en
contra de la línea que sostenía el reciente fallecido ex Secretario General.
Su único cargo que alcanzó fue el
de ser legislador por la ciudad de Buenos Aires en las elecciones de 2003
cuando el Partido Comunista se alió a otras fuerzas de izquierda y obtuvo esa
banca junto a Patricia Walsh. Esta alianza fue la segunda Izquierda Unida que finalmente
se perdió y se frustró en 205 cuando el Partido Comunista prefirió aliarse a
otras fuerzas de orientación pequeño burguesa.
Así comenzó un camino de apoyos
reiterados a partidos y políticos burgueses como el Frente para la Victoria y
no mirando al lado que le corresponde como partido marxista-leninista y
revolucionario, que es estar con y en la izquierda. La experiencia de la
primera izquierda Unidad con Luis Zamora del Movimiento al Socialismo entre
1988 y 1991 fue muy importante por la experiencia de haber tenido por primera
vez a un diputado marxista desde 1973.
Y el partido volvió a aliarse al
Frente para la Victoria como en otras elecciones sin que alguno de sus
dirigentes figuren en la listas en los cargos electivos. Se perdió la brújula
proletaria y revolucionaria al brindar apoyo a una organización que exigía a
los empresarios que desarrollaran un “capitalismo en serio” y alentaba al
crecimiento de la burguesía como motor del despegue argentino, ideales que son
propias para quienes defienden el sistema capitalista pero no para un partido
que se dice marxista-leninista y que lucha por la revolución y el socialismo.
Ahora para las elecciones de 2017
otra vez el Partido Comunista vuelve a aliarse con la Sra. Cristina Fernández
de Kirchner en la alianza “Unidad Ciudadana”. Por ese camino, nunca habrá
revolución ni socialismo en la Argentina.