EN EL NACIMIENTO DE ADAM SMITH Y JOHN MAYNARD KEYNES
Por Sergio Daniel Aronas – 8 de junio de 2017
El 5 de junio es una fecha importante para la
historia del pensamiento económico porque nacían 160 años diferencia los
futuros personalidades más influyentes del modo de producción capitalista. En
1723 el escocés Adam Smith, sobre el cual Karl Marx diría que es un economista
digno de respeto y que pasó a la eternidad su voluminoso libro “Investigación acerca
de la naturaleza de las causas del origen de la riqueza de las naciones”
publicado en 1776 donde aporta el primer estudio sobre la sociedad que los
sociólogos llaman “individualismo metodológico”. Ahí establece los principios
que debe tener un sistema impositivo, los gastos y el papel del estado, la
división del trabajo, lugar de la educación y formula su teoría del valor
basada en el trabajo de los obreros. Pobre Smith que en vida nunca se llamó
liberal sino que le pusieron ese nombre después de muerto y con un término
parido en el siglo XIX. Él fue un republicano escéptico que desconfiaba de los
grandes terratenientes, de los fabricantes y advirtió acerca de los efectos
perniciosos derivados de las altas ganancias empresarias. Su obra maestra de
cinco libros que cumplió 250 años de vida tiene esta estructura y entre
paréntesis el tema principal en el lenguaje económico actual::
1) De la capacidad productiva del
trabajo (Precios, valor y distribución)
2) De la naturaleza, acumulación y
empleo del capital (Crecimiento económico)
3) Del diferente progreso de la
opulencia en diferentes países (Historia Económica)
4) De los sistemas económicos
públicos (Historia del pensamiento económico)
5) Del ingreso del soberano o de la
comunidad (Finanzas públicas)
Una de sus expresiones más contundente es esta
y una de las que más me gusta:
“Es de la mayor
impertinencia y presunción en Reyes y Ministros pretender vigilar las economías
de las personas y limitar sus gastos, bien por leyes suntuarias o por la
limitación de la importación de artículos extranjeros. Ellos mismos son siempre
y sin excepción, los más grandes dilapidadores de la sociedad. Que cuiden muy
bien sus propios gastos y pueden confiar, con seguridad, en que las personas
cuidarán las suyas. Si su extravagancia no arruina al estado, jamás lo hará la
de sus súbditos”. Adam
Smith (1723-1790). Investigación sobre el origen y las causas de la riqueza de
las naciones, 1776, Libro II, Cap. III, Ed. Folio, Barcelona. Es mejor la
versión en castellano de Karl Marx, Teoría sobre la plusvalía, Tomo I, pág.253,
Ed. Cartago, Buenos Aires, 1974.
En el mismo año que
muere Marx, nace John Maynard Keynes considerado el fundador de la teoría
macroeconómica moderna como fundamentos de la teoría y política económica
burguesa, como el hombre que salvó al capitalismo de la crisis de 1929-1933,
dando nuevos enfoques a la investigación y análisis económico desde el punto de
vista de la “demanda efectiva” y a partir de ahí encarar el estudio de las
variables globales (inversión, ahorro, consumo, crecimiento, empleo) que
garanticen el equilibrio de la economía. Claro que llamar al estado para
resolver los problemas que el mercado no arregla es entrar en colisión con el
capital monopolista que lo combatirán. La aparición de la teoría de Keynes fue
el suceso más relevante del siglo XX en la formulación de la teoría económica
burguesa porque fue la repuesta más acertada para salvar al capitalismo de la
terrible crisis de 1929-1933 al darle al estado un papel decisivo en la
formulación de la política económica en franca oposición al enfoque neoclásico
que todo lo resuelve el mercado y el mercado en 1929 estalló por los aires y
ante el peligro de revolución había que dar una respuesta urgente. Ahí aparece
Keynes quien publica en 1936 el libro más determinante del pensamiento
capitalista “Teoría general del empleo, el interés y el dinero” y sobre el cual
existen bibliotecas enteras a favor y en contra.