EL DIA QUE FLAMEO LA BANDERA DOMINICANA
Por Sergio Daniel Aronas
El año 1898 marcó el año de la partida de
nacimiento de la era imperialista de los Estados Unidos con su intervención
militar en la guerra por la independencia de Cuba contra España, a la que
siguió el bombardeo y ocupación de Puerto Rico que hoy sigue bajo la tutela del
gobierno estadounidense, la conquista de las islas Guam y Hawaii y por último
la invasión a las islas Filipinas contra el movimiento emancipador dirigido por
Aguinaldo para tener un trampolín con vistas a fortalecer sus posiciones de
dominio en Asia y Extremo Oriente. Fue una operación simultánea que desde el
punto de vista militar fue considerado exitoso para el naciente gobierno
imperial de los Estados Unidos. En el caso de Cuba la ocupación estadounidense
quedó plasmada por la imposición de la enmienda Platt que los historiadores
cubanos llaman el período neocolonial que sería liquidado el 1º de enero de
1959 con el triunfo de la Revolución dirigida por Fidel Castro al frente del
Ejército Rebelde.
En este breve resumen mostramos una cronología
de las intervenciones militares de los Estados Unidos en Centroamérica
1900: Imposición de tratados a Nicaragua y
Costa Rica para adquirir una ruta interoceánica.
1902: Estados Unidos crea la enmienda Platt a
la Constitución Cubana que le permite intervenir en los asuntos internos de la
isla.
1903: Imposición del tratado
A lo largo de la primera década del siglo XX y
teniendo como presidente a Theodore Roosevelt, el tristemente célebre creador
de la política del Gran Garrate, los Estados Unidos invadieron por cualquier
razón y excusa varias Repúblicas de América Central.
Un día como hoy de 1920 sucedió un hecho
inédito en la historia latinoamericana. Los Estados Unidos habían invadido,
asaltado y ocupado la República Dominicana cuya bandera fue arriada de todos
los rincones del país prohibiéndose su uso bajo severas penas. Resulta que a su
regreso del traslado a su México natal de los restos del poeta Amado Nervo, el
crucero argentino "9 de Julio" se ve obligado a hacer una escala en
Santo Domingo, donde estaban los marines vigilando el puerto. El comandante preguntó a Buenos Aires si debía saludar
al pabellón de Estados Unidos que flameaba en el puerto. La respuesta firmada
por el presidente Hipólito Yrigoyen no se hizo esperar: "¡Id y saludad el
pabellón dominicano!". Aunque no disponían de ninguno a bordo, se lo
improvisó y se lo saludó con la salva de honor correspondiente. El pueblo
dominicano se dirigió masivamente al puerto a celebrar con alto patriotismo y
desafiando a los invasores, la entrada del buque argentino para ver a su
bandera prohibida desde el 15 de mayo de 1916. La ocupación militar duró hasta
1934.