GRECIA Y LA HIPOCRESIA DE LA UNIÓN EUROPA
Por Sergio Daniel Aronas – 09 de julio de 2015
“Ninguna nación,
salvo por la presión de su opinión pública y su propia necesidad de crédito
puede ser obligada a pagar una deuda a otro país. La insistencia en el cumplimiento
de un convenio que supere la capacidad de pago de una nación le serviría de
justificación para negarse a cualquier arreglo. Nadie puede hacer lo imposible.
Para que el deudor tenga la posibilidad de pagar y el acreedor pueda recibir
algo, es indispensable un arreglo que sea justo para los dos países. Quienes
insisten en cláusulas imposibles están propiciando en última instancia el
repudio completo de la deuda La única otra alternativa que tendría en tal
evento sería la de instar a los Estados Unidos a que iniciara una guerra para
cobrarla”.
Andrew W. Mellon,
Secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Declaraciones ante la Comisión de
las Deudas de Guerra, 14 de enero de 1926.
Retomamos el tema
de la crisis de la deuda Grecia porque es una caso testigo acerca de cómo se
maneja la política económica exterior de las potencias imperialistas de esta Europa
dirigida por Alemania, quienes desean aplicar quimioterapia a los países
endeudados y darles lecciones de economía acerca de cómo manejar la crisis.
El problema es que la
historia que tienen los alemanes es una palmaria evidencia de que no pueden dar
lecciones ni consejos a nadie ya que ellos mismos fueron reiterados
incumplidores de sus compromisos de deuda soberana especialmente por los terribles
y gigantescos daños y perjuicios ocasionados por las dos guerras mundiales que
ellos desencadenaron, tanto por la de 1914 a 1918 como por la de 1939 a 1945. Y
esas deudas originadas por la política nazi de guerras de agresión,
destrucciones, saqueos, robo, genocidios y exterminio de pueblos y naciones,
resulta ser que es una deuda manchadas
de sangre y sus aliados imperialistas hicieron todo lo posible para condonarlas
gracias a la bondadosa diplomacia occidental.
Para el caso de las
deudas de guerra derivadas de la Primera Guerra Mundial, se les regalaron una
serie de planes y pactos que redujeron notablemente la carga de esa deuda hasta
anularla por completo. Así surgió primero el plan Dawes (1924), pacto de
Locarno (1925), el pacto Briand-Kellog (1928) y el increíble plan Young (1929)
que permitieron licuar la deuda alemana por las destrucciones causadas durante
la guerra de 1914-1918 en un 98% y así se esfumaron los 132 mil millones de
marcos, que equivalía a unos 33 mil millones de dólares, una cifra astronómica
para aquella época. Cuando el nazismo llegó al poder, declararon nulas sus
deudas en junio de 1933 y no las pagaron nunca y ninguna potencia imperialista
como los Estados Unidos, Gran Bretaña o Francia se atrevieron a reclamarle algo
al fascismo alemán porque les convenía tenerlo como aliado para usarlo en
calidad de fuerzas agresora para invadir y destruir a la Unión Soviética. Luego
de la derrota total de 1945, la deuda alemana fue prácticamente abolida en el
tratado de Londres firmado el 27 de febrero de 1953. Este fue el gran secreto
que se esconde detrás del mal llamado “milagro alemán”, un milagro basado en un
desarrollo sin pagar a nadie por los desastres que causaron las criminales
políticas fascistas y que las potencias occidentales contribuyeron al engendrar
esta monstruosa criatura.
La recién creada
OTAN en abril 1949 necesitaba que Alemania se recuperara rápidamente y sirviera como dique de contención a la supuesta
“amenaza militar soviética” y por esa razón provocaron la partición de los dos
estados que duró hasta octubre de 1990. En resumen, los incumplimientos de
pagos de la deuda pública por Alemania se dieron por lo menos 10 veces en su
historia: 1683, 1807, 1812, 1813, 1814,
1850, 1923, 1933, 1939 y 1953. Y hoy en pleno siglo XXI pretenden decir a sus
aliados en crisis en la eurozona que paguen por culpa de sus amiguitos
teutones. Barato y eficaz!
Las potencias imperialistas europeas han olvidado su pasado de
incumplidores seriales netos de sus pagos de deuda soberana y con una presión
inaudita se arrogan el derecho de ahogar a un país como Grecia que no tiene
recursos de envergadura ni una economía de exportación capaz de soportar el
peso de la crisis sobre su propia base. Pero el gobierno no supo aprovechar el
referéndum para presentar su propia propuesta además de rechazar el torniquete
financiero de los bancos que ayudaron alegremente al endeudamiento del país helénico.
En realidad no quiso llamar al pueblo con una propuesta alternativa porque
seguramente no la tiene o si la tiene es que debe ser una variante del
ultimátum de la troika como un intento de demostrar que no quieren romper con
la Unión Europea y salir de la eurozona.
La política económica del endeudamiento tiene sus raíces más recientes
en los años `80 del siglo pasado, aquella década infame que la Comisión
Económica para América Latina (CEPAL) dependiente de Naciones Unidas, la llamó
la “década perdida”, vuelve a emerger con toda violencia con el intento de la
troika de exprimir a Grecia, quienes al exigirles el pago de los intereses de
la deuda de este país de recursos tan escasos, solo puede lograrse mediante un
drástico recorte de las condiciones del nivel de vida del pueblo, hecho que un
partido de izquierda no puede permitirse, peses a que está aliado con un
partido burgués como ANEL que defiende los intereses capitalistas, en una
alianza extravagante que le da aire para negociar en el Parlamento de 300
diputados.
La troika europea con su ajuste solo busca que le paguen y no le crea
condiciones para que Grecia pueda generar exportaciones con las actividades con
las que pueden obtener las divisas necesarias para hacer frente a la crisis.
Pero a esta troika los problemas sociales griegos les importa muy poco y solo les importa cobrar lo suyo. Desde que
Grecia entró en crisis, se puede decir que prácticamente ha quebrado. Sin
embargo, declararlo oficialmente, implicaría la quiebra inmediata de los bancos
alemanes y franceses atrapados en sus horribles negocios de ventas de armas a
los gobiernos anteriores a Syriza para gastos de defensa que el país no estaba
en condiciones de afrontar y ese es el pecado original de haber ingresado a la
OTAN y la entonces Comunidad Económica Europea.
El gobierno de Siryza ha manifestado una paciencia demasiada grande ante
las duras condiciones que les quieren imponer. Y es así que sigue intentando
negociar con los organismos políticos y financieros de la vieja y podrida
Europa porque aun desean no romper con la eurozona. Tampoco se sabe cuál es su
propuesta, que seguramente no será una salida revolucionaria, sino que su
objetivo es negociar con el apoyo logrado con el referéndum del domingo 5 de
julio. Y aquí se abren paso alternativas puestos que las negociaciones en
marcha no serán nada fáciles ni tampoco para el pueblo, quien seguramente será
sometido a un ajuste estructural de los que conocemos muy bien en América
Latina por más que el gobierno lo niegue. Y esto es así porque no tiene otra
salida y como prefiere negocias con la burguesía y no con la izquierda, hará el
plan de las clases dominantes, disimulando los sus negativos efectos sobre el
pueblo.
Aun así, no debemos tomar con mucho detenimiento como usará el actual
gobierno la victoria del NO con el rechazo a las medidas de ajuste del FMI-BCE
y Unión Europea porque las verdaderas negociaciones en política se hacen a
puertas cerradas, de noche y a espaldas del pueblo.
En la página web del Partido Comunista de Grecia
(KKE, por su siglas en griego) se puede tener buena información de la situación
del país y de ahí extraemos esta nota:
“Un día
después del referéndum del 5 de julio, en el palacio presidencial tuvo lugar el
consejo de los líderes políticos presidido por el Presidente de la República,
Pr. Pavlópulos. En este consejo que duró 7 horas tomaron parte el primer
ministro A.Tsipras, Ev.Meimarakis como presidente en funciones de la ND, el
presidente de To Potami St. Theodorakis, el Secretario General del CC del KKE
D.Koutsoumpas, el presidente de ANEL P.Kammenos y la presidenta del PASOK
F.Gennimatá.
Durante la
reunión, los partidos SYRIZA, ANEL, ND, To Potami, PASOK llegaron a un acuerdo
y de hecho firmaron un comunicado común, traduciendo el resultado del
referéndum como la aceptación del euro y de la UE y el allanamiento del camino
para un nuevo acuerdo antipopular.
Su
desacuerdo total con el comunicado común expresó el SG del CC del KKE, Dimitris
Koutsoumpas.
El Secretario General del CC del Partido Cominusta Griego (KKE), Dimitris Koutsoumpas, hizo la siguiente declaración después de la reunión de ayer de los líderes políticos presidido por el Presidente de la República:
“Hemos
escuchado la sesión informativa del presidente en la reunión presidida por el
Presidente de la República en relación con el desarrollo de las negociaciones y
discusiones en curso, después del referéndum del pueblo griego.
Expresamos
claramente, una vez más, las opiniones del KKE tanto respecto la evaluación del
resultado del referéndum, como sobre los enormes problemas que está
experimentando el pueblo griego en esta alianza depredadora de la UE con una
política que aumenta continuamente los caminos sin salida para el pueblo, para
los ingresos populares, para el curso del país, para el curso de nuestro pueblo
en general. Se ha demostrado una vez más que no puede haber una negociación a
favor del pueblo y de los trabajadores en el marco de la UE, en el camino de
desarrollo capitalista.
El KKE
estuvo en desacuerdo en el conjunto con el comunicado común, en lo que
acordaron todos los demás líderes políticos, los demás partidos políticos.
Nuestro desacuerdo tiene que ver además con nuestras evaluaciones sobre el
veredicto del pueblo griego ayer, así como con el curso y la táctica de la
negociación que propone el gobierno y aceptan los demás partidos, por lo menos
en su marco y dirección generales.
Nadie ha
autorizado a nadie a firmar nuevos memorandos para nuestro pueblo. Y estas
medidas van a ser duras.”
Respondiendo a la pregunta de un periodista de si está hablando de una “solución fuera del euro”, Dimitris Koutsoumpas dijo:
“No. Hemos aclarado una cosa, que esta política sin salida lleva a dos direcciones: o bien a la firma, como parece y como estamos observando -lo veremos los próximos días-, a un acuerdo doloroso, con medidas antipopulares-un nuevo memorándum o bien al desarrollo de una bancarrota estatal, con grexit, con salida del euro o con doble moneda u otra cosa. Esto lo dicen sobre todo los “socios”, no lo dicen los partidos en el consejo de líderes políticos, lo dicen los “socios”. Así, pues, nuestro pueblo debe estar preparado. La posición del KKE es que ambos resultados posibles, es decir tanto un acuerdo con memorándum y medidas duras, como con grexit u otra cosa, estarán a expensas del pueblo griego.
La ruptura
con la UE, con el capital y su poder requiere una estrategia totalmente
diferente, requiere el poder obrero-popular, con el pueblo realmente en el
poder y la socialización de los medios de producción, la retirada de la UE, la
cancelación unilateral de la deuda. Esta es la propuesta del KKE que constituye
una propuesta totalmente distinta y no tiene que ver con las diferentes
opiniones que llevarán al nuevo empobrecimiento de nuestro pueblo. Me refiero a
opiniones que existen en otros partidos, que actualmente son minoritarias, como
en el partido gobernante, respecto una salida solamente de la moneda.”
La gravedad de la crisis económica y social de Grecia derivada por el
monto astronómico del endeudamiento forzado por las potencias europeas, es de
una gravedad y de un peso tan grande que puede terminar en una situación
similar a la vivida por la Alemania de la República de Weimar, cuyas
obligaciones de pago de deuda derivadas de las reparaciones de guerra
provocaron la hiperinflación de 1923, la
destrucción del cuerpo social, de la moneda y fue el origen del nacimiento del
nazismo.
Dada la envergadura de la crisis, Grecia puede correr la misma suerte si
los imperialistas de la Unión Europea siguen apretando el torniquete financiero
y no le dan ni plazos, ni respiro, ni tregua para permitir una salida
democrática y justa a esta crisis terminal.
La propia crisis es una elemento que puede y debe poner a prueba al
partido gobernante griego Siryza y ver si es un partido verdaderamente revolucionario,
ideológicamente marxista y congruente con sus ideas de izquierda o se convierte
en otro partido burgués que administre la crisis con el fin el salvar a los
bancos y no al pueblo como es la típica receta de los capitalistas con
problemas financieros y sus métodos de regulaciones apuntas a descargar todo el
fardo sobre el pueblo trabajador y campesino, especialmente entre los jóvenes,
cuya tasa de desempleo es del 60%, un nivel de paro pocas veces visto en este
siglo.
La solución a la crisis la marcará el poder de lucha y la fuerza del
pueblo que puede sobrepasar las intenciones del partido gobernante, sus
maniobras y sus estrategias. El gobierno que ahora cuenta con suficiente
respaldo debe proponer y negociar su propio plan para salir de la crisis, le
guste o no le guste a los imperialistas europeos porque se trata de la
supervivencia de la nación griega que no puede seguir sometida a la guerra
financiera de unos bancos enloquecidos por cobrar sus créditos. Porque esta
gente sabía muy bien que Grecia en aquellos años no estaba en condiciones de
recibir esos créditos por no tener capacidad de pago y una economía exportadora
capaz de generar divisas para hacer frente a sus compromisos. Nuevamente las
horrorosas las descalificadoras de créditos le pusieron a Grecia la
calificación AAA y la llenaron de euros destinados a gastos de defensa inauditos
y no como algún economista ultra liberal quiere culpar a Grecia por sus
elevados gastos sociales.
En vista de esta situación tan extrema, el gobierno deberá empezar a
mirar hacia adentro de su propio país porque la capacidad de aguante y
resistencia del pueblo tiene un límite más allá del cual puede transformarse en
un verdadero problema nacional en el sentido de que no reconozca a las actuales
autoridades y busque una salida que sea aprovechada por los grupos fascistas
que tienen representación parlamentaria e imponer una nueva dictadura. Parecerá
temerario pero la historia tienen varios ejemplos de situaciones similares y es
bueno no olvidarlas y estar alertas.