LA
GRAN VICTORIA DEL SANDINISMO EN NICARAGUA
Por Sergio Daniel Aronas – 7 de noviembre de 2016
Oculto y tapados por la propaganda que se
dedica a transmitir las elecciones de los Estados Unidos, una masiva elección
en Nicaragua le dio la victoria al Frente Sandinista de Liberación Nacional al
obtener más del 72% de los votos de la población que de esa forma revalida al
gobierno presidido por Daniel Ortega, aquel combatiente guerrillero que en
calidad de comandante de la revolución de 1979 desempeñó un papel preponderante
en la victoria del FSLN, en el derrocamiento de la dictadura genocida de la
dinastía Somoza, el hijo de puta más apreciado por el entonces presidente
Franklin D. Roosevelt. Podrán decir lo que quieran del sandinismo y sobre todo
de Daniel Ortega pero para alcanzar más del 70% de los votos no es por gracia
de dádivas y prebendas ya que le pueblo nicaragüense no come vidrio puesto que ya
les dio una lección en febrero de 1990 al sacarlos del poder en aquellas terribles
elecciones, sino que es el resultado de la actividad del Frente gobernante en la
lucha constante por resolver los problemas que 17 años de gobiernos burgueses
no pudieron ni supieron solucionar. Aprendamos del FSLN acerca de como asimilar
las derrotas, reorganizarse, extraer las necesarias enseñanzas y unirse para
volver a conquistar el poder. Eso es saber ser revolucionario.
El sitio web de la BBC de
Londres da el siguiente informe:
“Para bien y para mal, la
figura del presidente nicaragüense Daniel Ortega está indisolublemente ligada a
la de Anastasio Somoza, a quien ayudó a expulsar del poder el 19 de julio de
1979.
Y, para muchos, su reelección para un
tercer período consecutivo este domingo -con 72,1% de los
votos, según las últimas cifras del Consejo Supremo Electoral- no hace sino
acentuar esta vinculación.
Por un lado, porque Ortega, quien regresó al poder
en 2007, indudablemente debe parte de su popularidad y longevidad en el poder
al recuerdo de la Revolución Popular Sandinista, la que le tocó
personificar y liderar de 1979 a 1990.
Pero también porque en Nicaragua muchos piensan que
el viejo comandante sandinista cada vez se parece más al tirano al que ayudó a
derrocar, lo que según la oposición explicaría una abstención que ellos
calculan en más del 70%.
(Aunque con el 66,3% de las
actas escrutadas el CSE habla de un 67,5% de participación).
Elecciones presidenciales - Nicaragua 2016
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Partido
|
% de votos
válidos (*)
|
Frente Sandinista de
Liberación Nacional (FSLN)
|
72,1%
|
Partido Liberal
Constitucionalista (PLC)
|
14,2%
|
Partido Liberal
Independiente (PLI)
|
5,0%
|
Alianza Liberal
Nicaragüense (ALN)
|
4,7%
|
Partido Conservador (PC)
|
2,5%
|
Alianza por la República
(APRE)
|
1,5%
|
*Con el 66,3% de las actas escrutadas
|
La comparación entre Ortega
y Somoza puede parecer exagerada, especialmente después de lo que oficialmente
es una victoria abrumadora en las urnas.
Sin embargo, para el periodista nicaragüense Carlos
Fernando Chamorro -quien como director del diario oficial del FSLN trabajó muy
de cerca con Ortega durante su primer período al frente de las riendas
de Nicaragua, de 1979 a 1990- es una comparación obligatoria”
Por su parte,
Dick y Miriam Emanuelson brindan esta crónica de la victoria sandinista.
La victoria
del sandinismo con 73 % en las elecciones presidenciales y más de 66 % a la
Asamblea Nacionales la tercera confirmación de cómo el FSLN ha crecido debido
de una politica económica y social inteligente y sensata. El colapso de la
oposición de derecha se confirmó también en estas elecciones ayer, domingo.
PARTICIPACION ELECTORAL:
Nicaragua 2016: 65,8 %.
Honduras Nov. 2013: 61,16%
Por Dick & Miriam Emanuelsson
En algunos medios se ha dicho esta mañana que la
abstención en las elecciones en Nicaragua ayer fue el gran ganador. FALSO.
En Radio Globo el director decía
que la abstención ayer en Nicaragua era hasta “60 %”, sin, como debe hacer
el periodista, mencionar la fuente.
En “Frente a Frente”, el periodista Renato Álvarez
por lo menos mencionó una fuente cuando dijo que la abstención había alcanzado
70 por ciento. La fuente fue un nuevo “Frente Amplio” de la oposición
abstencionista nicaragüense. Ésta tampoco ha mencionado cuál es su fuente para
poder tirar una declaración de tal naturaleza.
El periodista debe tener una posición muy restricta
y reservada a los actores en una contienda electoral como la de Nicaragua ayer.
En este caso la oposición de la extrema derecha pro estadounidense no ha
presentado más que su propio deseo “que así son las cosas”.
La experiencia de todos los periodistas que hemos
cubierto la campaña electoral en Nicaragua y el día de las elecciones es
totalmente contraria de los que ahora sale en CNN, Globo y Tele5.
¿Por qué David Romero de Globo no cita la colega y
reportera ADRIANA SÍVORY de TELESUR? Ella transmitía
en directo del lugar por los hechos y relataba que los nicaragüenses,
con sus sillas, comenzaron de hacer filas en la madrugada ya a las 4 de la
mañana ayer domingo en las afueras de los distritos electorales para
dar su voto. A medio día la concurrencia se aflojó un poco, debido al sol
radiante y por las horas del almuerzo. Pero en la tarde se intensificó
notablemente y que varios lugares en el país tuvieron que mantener
abiertas las puertas por la concurrencia de los votantes, todo según la ley
electoral.
Ese reporte contrasta, por su puesto, a las
declaraciones sin fundamento que ahora se hace sobre las circunstancias de las
elecciones en Nicaragua, un hecho penoso de punto de vista periodístico.
A pesar que la campaña por NO VOTAR era muy fuerte
por parte de medios como La PrenCIA, Radio Corporativa, algunos voceros de los
ex Contras o voceros del partido proyankie MRS de abstenerse en las elecciones,
y a pesar que una parte del liberalismo (Eduardo Montealegre) también recomendó
a los nicaragüenses de no ir a las urnas, la participación, según la Consejo
Suprema Electoral , CSE, fue extraordinaria, si tomamos en cuenta que la
oposición estaba prácticamente colapsada de punto de vista
político-organizativo y que no tenía ni programa ni base social-política.
Absolutamente TODAS las encuestadoras, nacionales y
extranjeras daba a Ortega y el FSLN una victoria cómoda, por lo cual el
sandinista en común no tenía por qué hacer un esfuerzo de ir a las urnas.
Seguramente más que un sandinista quedó en el sillón, observando el día de las
elecciones en la televisión con la familia en la casa.
Pero a pesar de eso, la PARTICIPACION ELECTORAL en
Nicaragua ayer fue 65,8 %.
Si comparamos el resultado de ayer domingo en
Nicaragua con las elecciones en Honduras en noviembre de 2013 que fue 61,16%,
según dato oficial del TSE, citado por Wikipedia, pues vemos unos datos interesantes que debe
hacernos reflexionar.
Porque el ambiente político en Honduras en
noviembre de 2013 era fuertísimo, había una confrontación política entre el viejo
establecimiento político del bipartidismo enfrentando el nuevo partido, Libre,
surgido de la Resistencia hondureña, había un auge muy grande en el debate
político. Es más, el surgimiento del partido anticorrupción, PAC, aumentó aún
más la intensidad del debate en Honduras. A pesar de eso, solo 61,16 % de
la población acudió a las urnas, según el TSE.
En Nicaragua ayer, la participación de la población
fue 65,8 %, es decir, más de cinco por ciento más que en Honduras. Eso
refleja organización, disciplina del “voto duro” del sandinismo pero sobre todo
una simpatía de la base social y político muy interesante al “Modelo
Sandinista” exitoso. Las encuestadores, además, había concluido que la
participación sería entre 70-75 por ciento.
A los colegas solo puedo decir; prudencia y cabeza
fría.
.