NOTAS BREVES SOBRE SAN LORENZO Y CHACABUCO

Por Sergio Daniel Aronas

Vamos a realizar unos breves comentarios sobre dos combates que tuvieron lugar en febrero durante la campaña del Gral. José de San Martín. Sobre San Lorenzo haremos una serie de aclaraciones que viene bien poner en el orden del día y terminar con ciertos mitos de este pequeño enfrentamiento por el tiempo que duró. Sobre Chacabuco haremos unas menciones sobre su importancia histórica y daremos una respuesta al sitio Reino de Chile que nos pedía corregir la cantidad de bajas del ejército de los Andes.

1) El combate de San Lorenzo

Un 3 de febrero de 1813 el entonces Coronel José de San Martín al mando de dos potentes escuadrones de granaderos armados con lanzas por él diseñadas llamadas "chuzas" de 3,50 de largo derrotaba a un contingente español que había desembarcado en las costas del Paraná con 11 oncebarcos y 3 buques de guerra, con el propósito de saquear la ciudad de San Lorenzo. Y para frenar estos actos impunes de la flota realista, se dio el combate de San Lorenzo sobre el cual es preciso remarcar los siguientes comentarios: 

1) Que no tremoló triunfal la bandera celeste y blanca creada por Manuel Belgrano pues no había sido aprobada por el gobierno, como erróneamente se canta en el Himno a la Bandera.

2) Que Juan Bautista Cabral quien saca a San Martín de la presión en la que quedó su pierna tras el derribo de su caballo, no era sargento, sino soldado y esclavo negro de la familia Cabral,

3) Que el soldado Cabral al morir dijo en guaraní sus últimas palabras: "Muero contento: Hemos cagado a estas mierdas" ;

4) Que en este combate los granaderos que participaron en el combate representaban a casi todas las Provincias Unidas del Río de la Plata, incluyendo al paraguayo Félix Bogado que terminó la campaña libertadora con el grado de coronel y el francés Hipólito Bouchard quien quitó la bandera a los invasore.

5) Que en este pequeño gran combate quedó bien claro que San Martín regresó a la América para liberar medio continente y contribuir de manera decisiva en la lucha por la independencia del reino de España y puso su vida en riesgo dando el ejemplo al encabezar el ataque al frente del primer escuadro

2) La batalla de Chacabuco

El año pasado publicamos un largo ensayo dedicada a esta importantísima batalla de la historia de la guerra de la independencia porque fue el inicio de la contraofensiva estratégica de las fuerzas patrióticas para terminar con el dominio colonial español en América del Sur como parte del plan continental que el Gral. San Martín preparó para su campaña libertadora.

El 12 de febrero de 1817 el ejército de Los Andes dirigido por el Gral. José de San Martín derrotaba en la batalla de Chacabuco a las fuerzas españolas al mando del Brigadier Rafael Maroto, dando inicio a la reconquista de Chile con la conformación de una alianza entre las Provincias Unidas del Río de la Plata y las unidades chilenas que se salvaron de Rancagua. Esta victoria significó que Chile nunca más volvería a caer en manos de los realistas. San Martín dividió sus fuerzas en dos divisiones: la principal al mando del Gral. Miguel E. Soler y la secundaria al mando del Brigadier Bernardo O´Higgins quien estaba con ánimo de vengar la derrota de Rancagua de 1814. Se combatió durante 10 horas porque San Martín ordenó movilizar sus cuerpos a las 2 de la mañana del 12/02 con la idea de realizar un ataque nocturno para sorprender al enemigo (algo impensado para al época). Los sucesivos ataques de O´Higgins casi ponen en peligro el resultado victorioso de la lucha, hasta que San Martín ordenó a Soler a avanzar con todas sus fuerzas para ganar la batalla en una ofensiva arrolladora.

Y he aquí mi respuesta al sitio Reino de Chile quienes me solicitaron en diciembre pasado que corrigiera las bajas patriotas.

Vuelvo a reiterar lo que escribí en aquella oportunidad. Llama la atención que muchos historiadores muy importantes como Bartolomé Mitre, Ricardo Rojas y otros, consideren que el ejército patriota solo tuvo 12 muertos en esta sangrienta batalla que se peleó con tanta ferocidad y no tomen en cuenta las pérdidas que tuvo el batallón Nº 8 de pardos y negros que combatieron con bravura y heroísmo para lograr la victoria integrando la división del Brigadier de Bernardo O´Higgins.  

La cifra de 132 muertos que aporta y analiza el Gral. Gerónimo Espejo en su pequeño trabajo “El paso de los Andes” es el más cercano acerca de lo sucedido en el campo de batalla. A no ser que por tratarse de negros libertos, para los historiadores liberales estas muertes no entran en la estadística y sigan con el cuento de las 12 víctimas mortales.

Nosotros reivindicamos a todos estos desconocidos soldados negro que formaron la infantería patriota que lucharon, murieron y triunfaron por nuestra y vuestra libertad e independencia.