¿QUIÉN AMENAZA A LA PAZ MUNDIAL Y DONDE PROCEDEN
LAS
GUERRAS EN EL MUNDO ACTUAL?
Por Sergio
Daniel Aronas – 10 de abril de 2018
En las condiciones actuales de la situación internacional
tan difícil y complicada, no hay conflicto bélico en el mundo donde esté la
mano siniestra de los Estados Unidos y sus socios guerreristas de la OTAN,
quienes para ejercer su dominio total en el planeta encienden la llama de la
guerra en los llamados “puntos calientes”, esas regiones ricas en recursos
energéticos y que por su ubicación estratégica en el mapa, están bajo la atenta
mirada de la voracidad insaciable de las fuerzas imperialistas.
1) Estados Unidos cuenta con 1.314.000 efectivos en sus
fuerzas armadas (ejército, marina, aviación y el cuerpo de marines), más
la reserva activa de estas cuatro fuerzas en 814.900 hombres, da un total de
2.129.900 hombres, a lo que deben agregarse otros 200.000 más de las fuerzas de
despliegue rápido creadas por el “pacifista” Jimmy Carter. En el extranjero más
250.000 militares brindan “servicios” criminales.
2) Posee 20.000 tanques, 4.000 cazabombarderos, 150 cruceros, destructores y
fragatas, 20 portaaviones diseminados por todos los mares del mundo (y
otros 6 de reserva); 50.000 vehículos blindados para el transporte de tropas; 2.000 helicópteros; 15.000 cañones; 80 submarinos nucleares de
ataque y otros 18 armados con misiles balísticos;
700 sistemas misilísticos autopropulsados; 500 misiles antimisiles Patriot y un
poderoso sistema de misiles balísticos intercontinentales situados en silos
bajo tierra y en submarinos.
3) Posee
uno de los mayores arsenales atómicos del mundo con 4.000 ojivas nucleares, de
las cuales 800 están en los misiles balísticos intercontinentales (ICBM): 1.920
en los misiles balísticos en submarinos (SSBN); 980 en bombarderos estratégicos
y 300 en aviones de combate. Es el primer productor mundial de armas de
destrucción masiva del tipo químicas, radiológicas y bacteriológicas y ha
desarrollado las “mini-bombas” atómicas de profundidad. Su presupuesto militar
para el año 2019 es de 710 mil millones de dólares.
4) La presencia militar del
imperialismo estadounidense se encuentra desparramada en 900 bases de la armada, 250 del
ejército y 214 de la fuerza aérea, tanto en su propio país como en otras
regiones del mundo que abarca unos 80 países. Estas bases están en Guantánamo, en la isla de Cuba, en contra de las leyes, del
derecho internacional y del pueblo, gobierno y constitución de
la revolución cubana), Canadá, Puerto Rico, Honduras,
Guatemala, Colombia, Grenada, Islandia, Gran Bretaña, Alemania, Bélgica,
Bosnia-Herzegovina, Italia, España, Grecia, Turquía, Kosovo, Polonia, Letonia, Estonia, Lituania, Kazajtán, Ucrania,
Moldavia, Macedonia, República Checa, Kirguistán, Uzbekistán, Tayikistán, Irak,
Emiratos Árabes Unidos, Afganistán, Tailandia, Arabia Saudita, Kuwait, Bahrein,
Egipto, Omán, Qatar, y en las islas de Ascensión, Bahamas, Antillas Menores, Azores,
Reunión, Seychelles, Filipinas, Diego García, Guam, Hawaii, en Singapur, Corea
del Sur y Japón, con el cual forma un vasto
imperio que abarca todos los mares, océanos y continentes.
5) Es
la única potencia militar que tiene centros de mandos para cada continente que
forma parte integrante de todo su dispositivo bélico en el planeta para sus
planes militaristas y expansionistas.
Con esta infernal maquinaria de
destrucción total ¿quién amenaza a quién a la paz y de dónde vienen
las
actuales guerras que sacuden al mundo?
Si las potencias
agresoras agrupados en la Organización Terrorista del Atlántico Norte (OTAN)
están tan enloquecidos en lanzarse a la guerra contra aquellos países que
supuestamente fabrican armas de destrucción masiva, los imperios criminales de Occidente,
deberían atacar a las 12 naciones que tienen programas de desarrollo de armas
nucleares, entre las cuales se encuentran los seis países que oficialmente
hicieron detonaciones atómicas además de los Estados Unidos y que son Rusia,
Gran Bretaña, Francia, China, India y Pakistán o las 16 que tienen armas
químicas, a las 13 que tienen armas biológicas o las 36 que poseen misiles
balísticos de diverso tipo y alcance (Ver America at Risk, The Citizen´s guide
to missile defense, by James H. Anderson, Ph.D., The Heritage Foundation, 1999).
Aquí
habría que decir lo siguiente: no creemos que casi en veinte años se haya modificado
substancialmente esta cantidad de naciones que tienen algún tipo de esas armas
letales. Con la salvedad de Iraq, con cuya invasión ilegal en marzo de 2003, se
demostró que no tenía ningún tipo de arma de destrucción masiva, hecho que el
gobierno de Saddam Hussein aseveraba en todo momento. La segunda aclaración es
la incorporando a esta lista de potencias nucleare a Israel cuyo gobierno sigue
negando la existencia de sus reservas atómicas, pero se estima en 200 el número
de ojivas en sus arsenales. Y la tercera aclaración es la situación de Corea
del Norte, un país comunista como pocos, que defiende su sistema político,
económico y social y por esa razón se arma en defensa de su patria socialista,
por lo cual el imperialismo -empecinado en destruirla- debería pensarlo dos
veces si tomara la insensata opción de iniciar una ofensiva militar.
Los Estados
Unidos es el primer productor mundial de todas esas armas destructivas: posee uno
de los mayores arsenales de armas atómicas, la mayor reserva de armas químicas,
bacteriológicas y radiológicas como así también encaró proyectos para la
fabricación del arma neutrónica, iniciado durante la presidencia del “pacifista”
Jimmy Carter cuando el 6 de agosto de 1979 autorizó los fondos para su
producción, es decir, el mismo día del aniversario de la explosión de la bomba
nuclear en Hiroshima. Y como el imperialismo tiene quien le escriba para
justificar sus invasiones militares, toma las relaciones internacionales como “choque
de civilizaciones” de acuerdo a la “teoría” de Samuel Huntington, actualizada
con la doctrina de “cambio de régimen”. Si esto sucede es porque la dictadura
capitalista se ve obligada a vivir de la guerra permanente para que su sistema
de dominación siga manejando los asuntos mundiales.
Es por ello que resultan
ridículos los intentos del gobierno de los Estados Unidos de presentarse en
calidad de guardianes de la moral y la seguridad internacional al atacar a
países subdesarrollados que procuran defenderse de las amenazas y de las
agresiones militares imperialistas como así también explicar los inexplicables
motivos de sus dementes bombardeos criminales.