A 130 AÑOS DEL PRIMERO DE
MAYO
Por Sergio Daniel Aronas
En este Primero de Mayo de 2016 se cumplieron 130 de la batalla social de
Chicago en la ciudadela del capitalismo que son los Estados Unidos. Así la
llamó el gran líder de la independencia de Cuba, José Martí en su crónica para
el diario argentino La Nación del era corresponsal y partícipe de los
acontecimientos relacionados con el mamarracho de juicio a los ocho acusados de
afectar los intereses privados de la fábrica maderera McCormack y los
incidentes en el Hay Park que llevaron a la detención, enjuiciamiento y
ahorcamiento de los anarquistas falsamente detenidos por cargos y hechos que
nunca cometieron. La historia que escriben los que recuerdan su verdadera
historia y que levantaron con fuerza la causa que defendieron estos héroes del
movimiento obreros, fueron llamados “Los Mártires de Chicago”.
Ya hemos escrito en este blog una nota dedicada a este acontecimiento que
dio vuelta todo el mundo en el justo reclamo por ocho horas de trabajo, ocho
horas de esparcimiento y ocho horas de descanso, el fin del trabajo infantil,
el fin del trabajo de las mujeres en las minas y otras reivindicaciones obreras
que las legislaciones de los países fueron aceptando y adoptando tras un mar de
sangre de obreros en todo el planeta.
Un crimen como el que ocurrió hace 130 años tan vil y traicionero no
puede ser jamás olvidado ni perdonado puesto que en el todo el mundo habrá
personas, partidos, organizaciones e instituciones que marcharán levantando las
banderas de los que murieron en esa cárcel macabra y porque la profundización
de la expansión del capital a favor de los intereses imperialistas, sigue
explotando mano de obra barata, se verifica en la destrucción del medio
ambiente, en los despidos masivos en muchos países, en los intentos de las
clases dominantes de apropiarse en niveles gigantescos de los bienes que
producen los trabajadores, acentuando la lucha por la distribución del ingreso,
el sostenimiento de los sindicatos e impedir que la pobreza y la miseria se extienda
por todo el planeta.
Reproducimos la declaración firmada por siete partidos comunistas y
obreros de varios lugares del mundo en este primero de mayo que tomamos de la
web del Partido Comunista de Grecia (PCG-KKE).
VIVA EL PRIMERO DE MAYO!
Declaración Conjunta de
Partidos Comunistas y Obreros
Los Partidos Comunistas y
Obreros firmantes la presente Declaración Conjunta, a vísperas del Día de los
Trabajadores del 2016, queremos resaltar nuestra solidaridad con
todos los trabajadores que luchan contra la barbárie capitalista a
través de huelgas, manifestaciones y otras formas de resistencia. Es
evidente que, en condiciones de crisis capitalista que se profundiza,
la fuerza política y organizativa del proletariado internacional será uno de
los factores más determinantes en la remodelación del mundo en el próximo
futuro. Con fe firme al éxito absoluto de la lucha de la clase obrera, como
partidos comunistas saludoamos al Día de los Trabajadores.
Los Partidos Comunistas y Obreros firmantes la
presente Declaración Conjunta, a vísperas del Día de los Trabajadores del
2016, queremos resaltar que, en oposición a las teorías burguesas y oportunistas, la realidad es que la
clase obrera no sólo no ha desaparecido sino que se está desarrollando y
creciendo a nivel de cantidad y calidad, como la fuerza productva básica
independientemente de los cambios en el proceso de producción causados por el
progreso tecnológico. En todos los países hay variaciones y diferenciaciones en
cuanto a la concentración de la clase obrera, su distribución en los diversos
sectores, existen diferentes ritmos de destrucción de las capas medias, de la
pequeña producción agrícola, en las oscilaciones de los flujos de inmigrantes y
en otros factores individuales que afectan los indicadores de cantidad y
calidad de la clase obrera.
Es necesario que los
partidos comunistas y obreros estudien tales factores para reforzar su
estrategia y táctica, para contribuir en el fortalecimiento de la unidad
clasista de la clase obrera, en la alianza social con los sectores populares.
Por supuesto que el tema esencial es que los cambios que se producen
justifican, sin lugar a dudas, la conclusión que la clase obrera sigue siendo
la fuerza motriz del desarrollo social y que su misión histórica es la
abolición de la propiedad privada, la abolición de las clases, de la
explotación del hombre por el hombre. No hay otra fuerza social que pueda
desempeñar este papel.
Hoy, la realidad de la
crisis económica capitalista profunda, que se ha manifestado de forma
sincronizada en varios países capitalistas, demuestra una vez más que el
capitalismo que está en la etapa superior, última y parasitaria de su
desarrollo, la etapa imperialista, provoca sufrimiento a millones de
trabajadores en todo el mundo, genera pobreza y paro, padece de contradicciones
incurables que se manifiestan mediante crisis cíclicas y guerras para la
expansión de los negocios de los monopolios, la división de los mercados, el
control de las fuentes de riqueza.
La crisis del capitalismo
evidencia los límites históricos del sistema socioeconómico mientras la clase
obrera, que no tiene a su disposición los medios de producción, sigue siendo el
“sepulturero” del modo de producción capitalista. Este papel histórico
revolucionario de la clase obrera requiere su organización en clase para si.
La clase obrera no puede
tener éxito a través del “consenso social” y la “paz” social, según sostienen
fuerzas reformistas y oportunistas. Los muchos años de experiencia negativa
demuestran que esta línea llevó a la asimilación a grandes partes del
movimiento sindical, del cual la socialdemocracia y las fuerzas del oportunismo
tienen la responsabilidad básica. Hoy en día es necesario para el capitalismo
derrocar hasta las conquistas más básicas logradas en las décadas anteriores
como resultado de la lucha de clases a nivel nacional e internacional.
La lucha obrera para
impedir las medidas antipopulares, por reivindicaciones y conquistas económicas
y sociales en condiciones de capitalismo se conecta eficazmente con
la lucha por la sociedad socialista-comunista.
Las reivindicaciones
económicas, sociales y políticas en base a las necesidades populares actuales
de la clase obrera, teniendo como objetivo la aglutinación, la concentración y
preparación las fuerzas obreras para confrontaciones duras con el sistema
explotador, no se restringen en tener algunos logros inmediatos. Están
vinculadas con la meta de derrocar la barbarie capitalista. La clase obrera
produce la riqueza y debe revindicarla, revindicando su propio poder.
¡ Viva el Día de los
Trabajadores!
¡ Viva la solidaridad
internacionalista, el Internacionalismo Proletario!
¡Proletarios de todos los
países, uníos!
Partido Obrero Húngaro
Partido Comunista de Grecia
Partido Socialista de
Letonia
Partido Comunista de Mexico
Partido Comunista Obrero de Rusia
Partido Comunista de los Pueblos de España
Partido Comunista, Turquía
Partido Comunista de Venezuela
28.04.2016